Tras cerrar los acuerdos con Xavi y Sergio, el siguiente será Víctor. Las negociaciones se han iniciado y las sensaciones son positivas
Víctor Valdés será el siguiente en entrar en la vorágine de renovaciones que ha establecido el FC Barcelona. Tras cerrar los acuerdos con Xavi y Sergio Busquets, el club blaugrana tiene la intención de acelerar las negociaciones con el portero. De hecho, el proceso ya se inició hace unas semanas con varias reuniones entre el padre del jugador que ejerce asimismo de representante, José Manuel Valdés, y el director deportivo del club, Txiki Begiristain. En estas reuniones se formalizaron ya las grandes bases del nuevo contrato, aunque según fuentes consultadas se encuentra aún en un proceso embrionario.
Por ahora el apartado que parece estar totalmente consensuado por ambas partes es en la duración del nuevo contrato que se ha fijado hasta el 2014 -el mismo que ya tiene Xavi bajo el brazo-. Hay que recordar que Valdés finaliza contrato en el 2010, por lo que el nuevo acuerdo le uniría cuatro temporadas más a la entidad catalana. Tampoco parece que plantee muchos problemas su actual cláusula de rescisión que está fijada en 100 millones de euros, un precio prohibitivo a todas luces para cualquier club.
Sin embargo, las auténticas diferencias a día de hoy aparecen en el apartado económico y más concretamente en la ficha más variables. Pese a no ser insalvables, resulta evidente que todavía queda un largo camino que recorrer hasta que se encuentre un consenso que contente a ambas partes. Además, el repentino viaje de Txiki al Japón por la enfermedad de su hermano ha obligado a paralizar las negociaciones hasta nueva orden, por lo que el acuerdo podría demorarse más de lo previsto inicialmente.
En todo caso, el Barcelona se guarda asimismo un as en la manga por si las negociaciones se rompen o el escenario se complica. Y es que el club blaugrana ya ha mantenido también contactos con otros porteros como el del Villarreal, Diego López, para conocer cuál es su estado contractual y su interés.
Eso no quiere decir, evidentemente, que la prioridad absoluta del Barcelona sea la renovación de Víctor Valdés y que el club esté dispuesto a hacer un esfuerzo importante para mantener a un guardameta que se ha convertido en una referencia en el equipo y en una garantía total.
No hay que olvidar que la trayectoria del tercer capitán blaugrana es intachable. Pese a contar con sólo 26 años, el meta suma ya siete temporadas en el primer equipo, siendo titular indiscutible en las últimas seis. A veinte partidos de cumplir los 300, Valdés ha dejado atrás las polémicas que siempre habían acechado entorno a la portería blaugrana. ‘Stajonovista’ al máximo en los entrenamientos, el portero catalán es una persona admirada y respetada tanto por sus compañeros como por sus técnicos.
Tal vez a día de hoy la única espina que aún tiene clavada es su sorprendente ausencia en las convocatorias de la selección española absoluta en partidos oficiales. Es cierto que el portero del Real Madrid, Iker Casillas, se ha ganado a pulso el puesto número uno de los guardametas nacionales, pero a partir de esa posición privilegiada, el resto es mucho más aleatorio y disputado. El meta del Liverpool, el ex blaugrana Reina, o el del Sevilla, Palop, no son mejores que Valdés.
Este pequeño borrón no mancha en todo caso una extraordinaria carrera que confirma a Valdés como el mejor portero del Barcelona de los últimos quince años. Tras Andoni Zubizarreta no ha habido un portero que haya jugado tantos partidos y soportado tanta presión como Víctor. Con dos Ligas y una Liga de Campeones bajo el brazo, Valdés va camino de alcanzar y superar al maestro de maestro entre los porteros españoles.
16/12/08 |
